viernes, 2 de enero de 2009

Ya vienen los Reyes


Me refiero, claro está, a los Magos que son los que molan. Esa sí que es una monarquía de las buenas. Digo que ya vienen y ¡cómo vienen de cargados!, aunque rara vez nos echan lo que les pedimos.
Ya le habíamos visto la cara –la verdadera- al dimitido Gaspar (Llamazares) y al vigente –aunque algo deslustrado y con menos brillo- Baltasar (Garzón). Faltaba Melchor. Pues ahí lo tienen.
Hace un par de años, se apostaron en la puerta de El Corte Inglés de la calle Pintor Sorolla de Valencia, un grupo de muchachos bastante crecidos y vocingleros con una pancarta que rezaba (perdón): “Niños, los Reyes son los padres”. ¿Que parece mentira? ¡Pues por éstas que es verdad! Ya son ganas de jorobar y de dar la nota. Será que padezco el síndrome de Peter Pan, pero aún recuerdo lo mal que me sentó enterarme y el trago que me supuso cada vez que tuve que decírselo a un hijo (tengo tres). Luego resultó que ellos ya se habían enterado por su cuenta, antes de que yo se lo dijera. ¿Y qué les habían hecho a esos jóvenes –o al medio ambiente, a la justicia social, al statu quo climático o a la capa de ozono- los Reyes o los niños? Misterios de la peña reivindicadora. Los hay que se aburren y les da por ahí, por fastidiar. Igual era un grupo de Educadores Sin Fronteras que estaba haciendo un taller pedagógico para la ciudadanía, o una clase práctica, a pie de obra, para la gente menuda (un amigo dice que el colmo son los “Aduaneros sin Fronteras” pero a mí me suena, más que a oenegé, a la vaca sin cencerro que nombraba Almodóvar). Y dale con la manía de educar al hijo del prójimo y explicarle cosas. Estos racionalistas a ultranza son de un fanatismo parejo al que dicen combatir. Claro que todos los fanatismos son iguales.
Pues si eso, que es pecata minuta, cuesta de creer, aún resulta más difícil digerir lo del Código Civil catalán. El Libro Segundo, relativo a la familia, poco menos que deroga la denominación de “padres” (afortunadamente no la figura... todavía) y la sustituye por la de “progenitores”. Impone que (¡agárrense!), al cumplir los doce años, a los niños adoptados se les habrá de informar obligatoriamente sobre su origen. Éstos del tripartito son unos totalitarios y unos ceporros: establecen hasta el regalo de cumpleaños. Durante el gobierno de Maragall quisieron prohibir que en las tiendas de souvenirs de Las Ramblas vendieran muñecas de plástico vestidas de faralaes y toritos de fieltro. Lo intentaron justificar en que eran artículos cutres y horteras. Pretenden intervenirlo y regularlo todo: la estética (¿sobre gustos no hay nada escrito?), la familia, la lengua y la leche. Cuando algo no les cuadra, advierten al disidente de lo que le espera agitando su cuatribarrada; la suya propia con forma de esvástica. Hace mucho más tiempo, Tomás Ramón Fernández, catedrático de Derecho Administrativo de la Complutense y aficionado a los toros, participaba en un debate sobre la Ley catalana de Protección de Animales. Como se mostrara crítico con la norma (habría que aclarar que desde el punto de vista técnico-jurídico), se alzó uno de estos camisas pardas y le interpeló: “¿quién es usted para meterse con una ley aprobada soberanamente por el Parlament de Catalunya?” El profesor no se amilanó y lo despachó con dos papirotazos: “A mí no me calla la boca nadie y menos cuando estoy hablando de lo mío, de lo que entiendo, de disposiciones legales. No me he dedicado toda la vida a estudiarlas, a analizarlas y a criticarlas para que venga alguien como tú a decirme lo que puedo o no puedo decir. ¡Hasta ahí podíamos llegar!” Conque, hablando de reyes y visto lo visto, no sé si prefiero al Borbón o al Tardá.
—Los Reyes son los padres. (En Cataluña, los progenitores: los padres que, a veces, no son los padres. Por lo menos biológicos.)
—Vale.
—Y las madres.
—Es verdad, también las madres
—Bueno, mejor dicho la madre; que es sabido que no que hay más que una.
—Sí: la madre que los parió.

4 comentarios:

Mike dijo...

Me ha gustado mucho tu post. Pero... no te estarás dejando pillar un poco por la monarquía..? :D

metempsicótico dijo...

Tranquilo Mike, que no.

Pocomancha dijo...

A Leonor le han confesado que los Reyes son los abuelos... XD

¡Muy bueno tu artículo!

David dijo...

Siento deciros que los Reyes no son los padres, es un ventrílocuo (por lo de vientre) y vive en Moncloa:

Por si os pica la curiosidad...